Como se puede observar en las fotos de la parábola, una vez pintada, el estado en que se encontraba era bastante malo; el óxido había deteriorado el borde de la misma y para limpiarla tuve que lijar a conciencia.
El efecto conseguido con la pintura, evidentemente, no es el mismo que si se hubiera cromado pero, siendo bastante más barato, espero que cumpla el fin al que se destina.
Al ser la primera vez que pintaba con este tipo de spray, cometí el pequeño error de dar dos manos antes de dejar secar; el resultado final hubiera sido mejor si sólo hubiera dado una mano.
Aún así, espero que no absorba mucha luz del foco. En su momento reflejaré el resultado de la operación.