lunes, 19 de septiembre de 2011

A vueltas con las gasolinas... (y III)

 
Dejamos la anterior entrada del tema, afirmando que las gasolinas de 98 octanos e incluso más, son las usadas en los motores más “deportivos”, aquellos que funcionan a más altas revoluciones, que están más exigidos mecánicamente y que son capaces de proporcionar una generosa cantidad de potencia.

Actualmente, y debido a la competencia existente, muchas compañías petrolíferas, fabricantes de gasolinas y gasóleos, nos brindan una publicidad muy atractiva, mostrándonos las excelencias de sus productos y prometiéndonos aumentos de potencia espectaculares (algunas van más allá del 10 %) al usar sus nuevas gasolinas de 98 octanos.

Aunque, como bien demuestran organizaciones de consumidores, y alguna que otra revista especializada en el mundo del motor, es algo que está bastante alejado de la realidad.

En la inmensa mayoría de los vehículos que circulan por nuestras calles y carreteras, el usar una gasolina de 98 octanos, en vez de otra de 95, única y exclusivamente, tiene repercusión en el bolsillo del propietario, puesto que las gasolinas de 98 octanos son sustancialmente más caras que las de 95.

Y las razones de que esto sea así, creo que quedaron claramente expuestas en las anteriores entradas del tema: únicamente si el motor del vehículo está, digamos, “preparado” para ello, será capaz de sacar todo su potencial a estas gasolinas, de lo contrario, la potencia que podrá suministrar el motor será, en la práctica, la misma con una gasolina que con otra, independientemente de lo que puedan proclamar, publicitariamente hablando, las compañías petrolíferas al respecto.

Por tanto, la conclusión que podemos sacar, después de estas pequeñas diatribas entre unas gasolinas y otras es bien clara: en vehículos con motores “normales”, podemos usar gasolina de 95 octanos sin ningún inconveniente; también podemos usar gasolinas de 98 octanos, pero, no nos engañemos, el único que lo notará será nuestro bolsillo, a menos, y el de las petroleras, a más.

Y en los vehículos que nos ocupan, Vespas y Lambrettas (siempre hablando de modelos de serie, no preparaciones con kits termodinámicos,...), con sus modestas relaciones de compresión y sus limitadas cifras de potencia, será mucho más que suficiente, alimentarlas con una buena gasolina de 95 octanos a la que se le añadirá un buen aceite sintético en la proporción adecuada y, ¡¡¡a hacer kilómetros!!!

4 comentarios:

Marcos dijo...

Como siempre muy didáctico, esperemos que esto saque a más de uno de su error. Yo estoy plenamente de acuerdo contigo pero si que me encontrado a gente que asegura tener un rendimiento extraordinario por poner 98 ...este tema me recuerda a uno de os mayores timos de la historia moderna, el del famoso "efecto 2000", la de ordenadores que se vendieron con semejante bulo ..... pues eso.

xastre dijo...

Incluso hice pruebas empíricas en la Vespa, consumiendo varios depósitos con gasolina de 98 octanos, al mismo porcentaje del mismo aceite sintético, y no conseguí encontrar diferencias, al menos, en el uso diario; no sé si alguien habrá metido en el banco de potencia una Vespa para ver las posibles diferencias, no digo que no las haya, sólo digo que yo no las encontré; incluso corren por ahí pruebas de organizaciones de consumidores y revistas del motor, hechas con las distintas gasolinas en vehículos modernos, y no encuentran mejorías apreciables...

¡¡¡Un saludo!!!

Guillerb dijo...

No puede haber ventaja, ya que lo que marca el octanaje es la capacidad antidetonante, pero ninguna propiedad calórica extra; esos 3 octanos de más no esconden ninguna potencia extra.
Cosa distinta es que motores con alta relación de compresión no rindan todo lo que debieran con gasolina de 95 octanos y necesiten la de 98. En el caso de las vespas, con preparaciones (sobre todo con polini) la diferencia entre una y otra se nota porque con la de 98 pica menos biela; parece que anda mas pero no es así, simplemente antidetona menos, y lo que habría que hacer es tocar el encendido los 3º que recomienda el fabricante.. se notan mucho mas otros factores como presión atmosférica (altitud, hora del día) que los 3 octanitos de marras

Por cierto; muy bueno tu blog, que sigo desde hace tiempo, pero hasta hoy no había tenido "necesidad imperiosa" de comentar..

xastre dijo...

Hola Guiller, me alegro que sigas el blog y te animo a comentar cualquier cosa que se te ocurra.
Veo que estamos de acuerdo en el tema de las gasolinas aunque, no creas, todavía me encuentro con algunos que juran que su Vespa (totalmente de serie) da más potencia y anda más cuando le echan gasolina de 98...

¡¡¡Un saludo!!!